Lograr capacitar en temas de turismo de naturaleza a las comunidades rurales en medio de la pandemia implica un gran reto tecnológico y a la vez una gran oportunidad para aprovechar el momento y sumar actores comprometidos a la distancia. Este es el caso del programa de las Rutas Turísticas por los Bosques y la Paz, el cual se está desarrollando en Bocas del Atrato en el Urabá Antioqueño, en la Serranía del Perijá en el Cesar y en la Serranía de las Quinchas en Boyacá, logrado capacitaciones por WhatsApp, sumando en cada territorio más de 30 actores que están activamente participando con una metodología innovadora a través de sus celulares.
El proyecto, que tiene por objetivo potenciar el turismo comunitario en ecosistemas estratégicos, como medio para reducir la deforestación, fortalecer el tejido social y la paz y aportar a la generación de ingresos sostenibles, cuenta con el respaldo del programa de UK-Pact del Ministerio de Energía, Industria y Estrategia industrial del Reino Unido- BEIS UK. Para el desarrollo del proyecto se han sumado entidades inglesas como Think Galapagos, Acorn Tourism, Talking Transformation y el Jardín Botánico de Londres – RBG Kew, quienes junto a E3, el Programa de Desarrollo y Paz del Cesar, Boyapaz y el Consejo Comunitario de Bocas del Atrato y Leoncita, han logrado “viajar virtualmente” en medio de la emergencia sanitaria y estar más unidos para seguir apostándole a preparar las rutas turísticas por los bosques y la paz.
Se han preparado módulos en etnobotánica, acuerdos comunitarios, desarrollo de rutas, mercadeo y promoción, que se van desarrollando semana tras semana en cada territorio con gran receptividad por parte de todos los involucrados. El éxito ha estado en el desarrollo de materiales apropiados, el manejo de los grupos por WhatsApp con reglas de participación que han sido cumplidas y el entusiasmo de instructores y participantes quienes van siguiendo el hilo de las capacitaciones.
Las comunidades saben que, pasada la pandemia, los turistas querrán visitar lugares especiales por la conexión con la naturaleza y la gente, en grupos pequeños que sean más fáciles para manejar los nuevos protocolos de bioseguridad. Por eso agradecen este tiempo para seguir capacitándose y preparándose para lograr el sueño de recibir turistas consientes, que quieran apoyar la reactivación económica de territorios maravillosos en donde es posible conectar la protección de los bosques, la cultura y la paz.